Que el Mono Burgos además de que fue un gran y peculiar
guardameta, tiene anécdotas para aburrir. A las ya relatadas en este blog de
sus pelos y su padre peluquero, sus gorras y sus problemas con el sol, su grupo
musical “THE GARP” (iniciales de su nombre y apellidos), hay que añadir otra no
menos curiosa y graciosa:
Jugando en una ocasión con la Selección Argentina “La Copa
del Oro” que se disputo en Buenos Aires. El árbitro del encuentro pitó un
penalti en contra de Argentina que no fue tal. El “Mono” que sabía que el
jugador había fingido se lo dijo al árbitro, además también le retó a que si se
lo paraba tenía que invitarles tanto a él como al lanzador a una cena. El
colegiado medio en broma medio en serio y sonriendo aceptó. Burgos, estuvo
inmenso, intuyó el lado del lanzamiento y lo detuvo. Aunque luego no se hizo la
famosa cena, tanto el árbitro como el lanzador y el "Mono" se rieron muchísimo y
esto cada vez que se cruzaban que él se encarga de recordárselo.
¡Todo un crack “El Mono”!
q grande!!!!
ResponderEliminarun recurso diferente de despistar al lanzador, jejejee
mono, grande!!!!
ResponderEliminarun recurso diferente para despiestar al lanzador, jejeje
Enhorabuena compañero por el blog, mis felicitaciones. Me ha gustado mucho el artículo sobre una de las ideologías del gran Mono Burgos, un grande en el mundo de la portería.
ResponderEliminarSeguiré entrando y aprendiendo de profesionales como tú y aportando desde mi humilde opinión en mi blog, que por cierto estás invitado a entrar cuando te apetezca.
Un abrazo fuerte.
pasionentrelospalos.blogspot.com.es